25 febrero 2025

Cómo controlar un ataque de risa y no morir en el intento


Antes de comenzar, quiero informar que: NO, NO SE PUEDE CONTROLAR.

Lo que voy a explicarles a continuación, es el cómo puedo hacer para minimizar la mayor cantidad de daño posible.

Hay personas que a veces quieren contar una historia o un chiste (normalmente malo) y comienzan a reírse tanto, que además de salírsele las lágrimas, termina contagiándote a ti la risa que le provocó el chiste que es muy malo. Mi hermana es una de esas personas.

Pero que pasa cuando estás en una reunión, salón de clases, oficina, situación tensa y de pronto, tu cuerpo te juega en contra y comienza un ataque de risa. 

Bueno, a mi me pasó y casi no la cuento, porque en una situación aquí en mi país me encontré con un policía militarizado que me detuvo en una infame alcabala y me solicitó que bajara del carro y le entregara la documentación.  

Resulta que el policía me solicitó los documentos (siempre ando con todos al día), se los entregué y los revisó. Cuando me preparaba para que fuera a darme alguna indicación, multa o cualquier cosa, el hombre simplemente me dijo: Puede seguir adelante ciudadano.

No se por qué pero eso  hizo que me diera un ataque de risa y realmente no lo contuve.

Comencé a reírme y el funcionario me comenzó a ver con cara de pocos amigos. Como tenía el auricular del teléfono puesto en la oreja, le hice señas al hombre de que me estaban contando algo y no sé por qué, él funcionario decidió quedarse conmigo. A los dos minutos, él y otros dos uniformados más, junto a mi, estábamos llorando de la risa. Al final, ni les comenté que me había provocado el ataque de risa y terminé marchándome sin problemas. 

¿Qué pasó?

Cuando comenzó el ataque, la peor manera de atacar este incómodo ataque de risa, hubiese sido, tratar de contenerla. La persona que estaba ahí, quizás hubiese pensado que me burlaba de él y las cosas pudieron haber terminado mal. Pero como estallé de repente, y busqué una buena excusa, la situación no pasó a mayores. 

¿Por qué ocurre esto?

Aunque no soy un profesional de la psicología, la medicina o la ciencia a la que corresponde el estudio de estos sucesos y ataques, lo poco que me he podido documentar, que lo mejor que se puede hacer es soltar la carcajada. Contenerla puede ser peligroso, similar al intentar contener un estornudo. 

Pero lo más importante: siempre tener una muy buena excusa en caso de ser un momento o lugar no adecuados.